BangBang Bar.
Ayer me desperté encima de un billar,
no sabia de donde venian todas esas luces.
Apenas sentia los dedos del frio,
Si las luciernagas tragaban dinero inservible.
¿Cuando tiempo llevaba muerto por dentro?
Sentia el vacio en mi estomago,
siluetas gigantescas me miraban con deseo,
aceptaba siempre comprar limosna,
regalar vodka, y disentir del liderazgo de los tigres.
Amantes escondidos entre cortinas,
tercipelo rojo flotando en nuestros pulmones,
sandalias esparcidas por la playa,
olas de dos metros que cubre de sangre tu rostro.
Hay una nota en la mesilla,
escrita por el, para ti,
fué de ayer, intuia mi destino,
mi dulce despertar entre barrocos tapices,
crecian las palmeras en la orilla,
todo se reduce en un gesto,
una pistola,una fotografia,un recuerdo,
una novela,una mirada,
un silencio.
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